Cultivar tomates en una bolsa de cultivo: Mejorar El Rendimiento De Los Cultivos De Tomate

1. PREPARACIÓN DE LAS BOLSAS DE CULTIVO

Los sacos de coco son cada vez más populares entre los agricultores por su versatilidad y eficacia en el cultivo de diversas plantas, incluidos los tomates. Estos sacos se fabrican con el material fibroso que se encuentra en la cáscara del coco, conocido como coco. Constituyen una excelente alternativa al cultivo tradicional en tierra, ya que ofrecen mejores propiedades de drenaje, aireación y retención de agua. Para preparar las bolsas de cultivo para el cultivo de tomates, sigue estos sencillos pasos:

Selección de sacos de coco

A la hora de elegir sacos de coco, es esencial seleccionar sacos de alta calidad diseñados específicamente para la horticultura. Busque sacos fabricados con fibra de coco 100% natural, sin productos químicos ni contaminantes añadidos. Esto garantiza un entorno seguro y saludable para tus tomateras. Pelemix ofrece sacos de sustrato de coco de excelente calidad como materia prima y asesoramiento técnico personalizado para cubrir todos los frentes que mejor se adapten a su cultivo de tomates.

Entre las mezclas y configuraciones que Pelemix tiene como soluciones para el cultivo del tomate tenemos:

• Fibra de coco de 16 mm: Caracterizada por partículas más grandes, la fibra de coco de 16 mm ofrece un drenaje y una aireación de las raíces superiores. Este tipo de coco es ideal para entornos en los que el encharcamiento es una preocupación, ya que evita el estancamiento de agua alrededor de la zona radicular.

Esta granulometría permite una retención óptima del agua a bajas tensiones permitiendo valores óptimos de agua fácilmente disponible sin provocar encharcamientos.

• Fibra de coco PLF: Este tipo de coco tiene una mezcla de partículas finas y gruesas. Esta estructura está diseñada para retener la humedad adecuada al tiempo que proporciona suficiente aireación al sistema radicular. Las partículas finas ayudan a mantener la humedad, mientras que las gruesas garantizan un buen drenaje y flujo de aire.
• PRO 50: Este tipo de mezcla aporta un 50% de partículas de gravilla y un 50% de granulometría de 16mm. Esta evolución está especialmente recomendada para aquellos sistemas de producción que permitan un mayor y mejor control del riego y del drenaje. Es fundamental que el aporte de agua y nutrientes sea constante, ya que con este mayor contenido de chips, el porcentaje de agua disponible es menor, siendo sustituido por un porcentaje de aireación que potencia el crecimiento generativo así como la precocidad de la producción.

• PRO 70: Esta mezcla se perfila como el máximo exponente para un estricto control del aporte de nutrientes al cultivo. Su mezcla con un 70% de aglomerado y un 30% de coco de 16mm incrementa notablemente el porcentaje de aire en el sistema radicular, potenciando la precocidad y la producción. Esta mezcla ha sido especialmente desarrollada para climas cálidos, la necesidad de aplicación de riego constante permite mantener una temperatura fresca ideal para las raíces.

• Eficaz – Desarrollo rápido y sano de las raíces: La alta capacidad de aireación promueve el desarrollo vigoroso de las raíces desde el principio. Imagine unas raíces sanas y abundantes que absorben eficazmente los nutrientes y el agua para un crecimiento y un rendimiento espectaculares.

Figuras: Bolsas de cultivo Pelemix para cultivos de tomate

• Se acabó el riego excesivo: Entre los criterios para la selección de la granulometría adecuada, se debe considerar el nivel tecnológico del sistema de riego del cliente. Un nivel tecnológico estándar tanto en climatización como en riego requiere una granulometría de 16mm, esta estructura permite una mayor tranquilidad para el agricultor, ya que al tener un mayor porcentaje de agua fácilmente disponible, las plantas la tendrán disponible ante niveles de estrés abiótico (cambios drásticos en el clima).

A medida que se permite un mejor control del riego y del clima, podemos recomendar a nuestros clientes un porcentaje de virutas en sus mezclas; la primera de ellas, la mezcla PLF permite este primer acercamiento en busca de una precisión en la cantidad de agua y nutrientes que necesita el cultivo. Esta dosificación necesita un análisis del porcentaje de drenaje y de los niveles de conductividad que cambiarán a medida que se desarrolle el cultivo.

El rendimiento de la granulometría PRO50 y PRO70 sigue la misma línea mencionada anteriormente. Cuanto mayor sea el contenido de viruta, más control de los pulsos de riego será necesario; la frecuencia tendrá que ser mayor para que el cultivo pueda trabajar en la zona donde el porcentaje de agua esté fácilmente disponible. Además, un mayor contenido de aire en la zona radicular hará que la planta se comporte de forma más generativa y dará lugar a una producción más temprana.

• Personalización, conductividad eléctrica (CE) y solución lista para usar:

Nuestras soluciones de bolsas de cultivo más comunes para el cultivo de tomates son:

– GB 1001816 – 28,8 litros de volumen, válido para 3-6 plantas por saco.

– GB 1001814 – 25,2 litros de volumen, válido para 3-6 plantas por saco.

Figura: Especificaciones de las bolsas de cultivo para tomates

Como puede verse en la imagen, ofrecemos una personalización especial adaptada a cada uno de nuestros clientes. Es posible hacer los agujeros de plantación y de drenaje según las necesidades del cliente. Los agujeros de plantación pueden ser circulares o cuadrados (los más habituales) y en las cantidades y tamaños requeridos; los agujeros de drenaje también pueden personalizarse y en las cantidades deseadas (normalmente 6, con 3 a cada lado).

El concepto de «listo para usar» está relacionado con la conductividad eléctrica (CE) y el nivel de tratamiento del coco. Ofrecemos las granulometrías mencionadas anteriormente en el interior, pero con procesos de lavado adicionales para proporcionar un entorno de cultivo óptimo, reduciendo los niveles de conductividad en el sustrato desde >10 mS/cm hasta valores inferiores a 2,5 mS/cm. Nuestras soluciones de fibra de coco lavada alcanzan niveles de CE entre 1 -2,5 dS/m y si el cliente lo necesita, se ofrece un proceso de lavado adicional que confiere una conductividad entre 0,6 y 1 mS/cm; un entorno perfecto para todo tipo de cultivos sensibles a la salinidad.

Como proceso adicional antes de establecer el cultivo, es esencial amortiguar las sales de sodio presentes de forma natural en la fibra de coco. Para ello disponemos de una solución de fibra de coco «tratada», a la que se realiza directamente en fábrica un intercambio de iones de sodio con nitrato de calcio, lo que significa que cuando el cliente recibe su producto lavado y tratado, está «listo para usar».

• Disponibilidad todo el año: Gracias a nuestra fuerte presencia internacional con 7 plantas de fabricación propias y 6 filiales repartidas por todo el mundo, no tendrá que preocuparse por temporadas o interrupciones en el suministro.
• Facilidad de uso, ahorro real y rentabilidad: Los Grow Bags se comprimen, lo que se traduce en menores costes de transporte y un manejo más eficiente en su invernadero. Optimice su espacio y sus esfuerzos mejorando el rendimiento de sus cultivos y garantizando la máxima calidad.
• Control preciso del pH: El coco coco oscila en un rango de pH entre 5,5-6,5, condiciones ideales para la disponibilidad de nutrientes. Crea las condiciones ideales para cada tipo de planta y maximiza la absorción de nutrientes.
• Reducir nuestra huella de carbono: Los Grow Bags están fabricados al 100% con fibra de coco, un subproducto reciclable y sostenible que contribuye a un futuro más ecológico y respetuoso con el medio ambiente. La eficiente capacidad de carga de la fibra de coco, gracias a su índice de compresión, reduce significativamente la huella de carbono.
• Producción más sana y libre de patógenos: La cáscara de coco con la que se fabrica el sustrato de coco se encuentra en superficies pavimentadas y alejadas de las zonas de cultivo, por lo que está libre de enfermedades transmitidas por el suelo. Esto crea un entorno limpio que reduce el riesgo de enfermedades transmitidas por el suelo.
• Ahorro de costes: Las bolsas de cultivo de tomate ofrecen una solución integral para los cultivadores, ahorrando costes, aumentando la eficiencia en las prácticas de cultivo y proporcionando bolsas contenedoras duraderas y fiables que garantizan la longevidad. Estas bolsas reutilizables están disponibles en varios tamaños para adaptarse a las diferentes necesidades de cultivo y cuentan con una garantía de plástico de 1-2 años para mayor tranquilidad.

Además, nuestras bolsas de cultivo agilizan el proceso de hidratación del sustrato de coco, lo que las convierte en una opción excelente para una gestión eficaz de los cultivos. Dada la rápida sustitución necesaria debido al TMV (virus del mosaico del tomate), también ofrecemos bolsas de menor volumen a precios más asequibles para adaptarnos a los ciclos de sustitución más cortos. Esta flexibilidad permite a los cultivadores mantener una alta productividad al tiempo que gestionan los costes de forma eficaz.

Figura: Bolsas de cultivo para tomates

2. PROCESO DE PLANTACIÓN

Cuando se trata de cultivar tomates con sacos de fibra de coco Pelemix, el proceso de plantación es crucial para garantizar una cosecha abundante y fructífera. La fibra de coco, derivada de la cáscara fibrosa de los cocos, ha ganado popularidad como medio de cultivo sostenible y eficaz para diversos cultivos, incluidos los tomates.

Preparación de las bolsas de cultivo de coco:

Antes de plantar, es importante preparar bien los sacos de coco. Empieza por hidratar las placas de coco siguiendo las instrucciones del fabricante (Pelemix).

Dependiendo de las condiciones del producto (lavado y/o tratado) serán necesarias algunas acciones previas para la preparación de la fibra de coco.

• Hidratación y expansión: Una vez colocados correctamente los sacos de cultivo en el campo, se procederá a la hidratación mediante la realización de varios pulsos de riego de diferente duración para una correcta expansión y evitar el desperdicio de agua en el proceso.

Se realiza un primer riego por goteo de aproximadamente +-5 minutos (Suponiendo un caudal de goteo de 1-1,2 L/h) para una primera absorción de agua; Esto activará las propiedades del coco y facilitará el proceso de expansión. Si la granulometría de los sacos de cultivo es media (16mm) se regará cada 15 minutos con una duración de 10 minutos de riego; si la granulometría ya tiene un contenido de chips en ella (PLF, PRO50 o PRO70) será necesario reducir la duración del riego evitando el desperdicio de agua en el proceso.

El volumen total de agua a suministrar será el 80% de los litros de los sacos de cultivo; es decir, si el saco de cultivo es de 100x18x16 = 28,8 litros, deberán añadirse 23 litros de agua en un proceso lento de pulsos de riego cortos para garantizar una expansión completa y adecuada.

• Tamponamiento: Una vez realizado correctamente el proceso de hidratación, es obligatorio realizar un proceso de tamponado para intercambiar los iones de sodio presentes de forma natural en el coco, neutralizarlos con nitrato cálcico y precipitarlos mediante riego fuera del saco de cultivo.

Elegir plántulas fiables:

La selección de plántulas de alta calidad es esencial para el éxito de la cosecha. Asegúrate de obtener tus plantas de una fuente de confianza, como una empresa profesional de plántulas, para garantizar la resistencia a las enfermedades y un crecimiento óptimo. Los plantones fiables contribuyen a una mayor absorción de agua y nutrientes, y a una producción de fruta constante durante toda la temporada, lo que los hace ideales para el cultivo en sacos de cultivo.

La siembra en semilleros puede realizarse en bandejas de alveolos debidamente cuidadas en viveros especializados, con un saneamiento y abonado especial para un excelente enraizamiento. Para el llenado de estas bandejas, Pelemix ofrece mezclas y soluciones especializadas para esta etapa tan sensible para las plantas, la mezcla Especial Viveros, 100% coco de 4mm, grow cubes o las diferentes Mezclas Semilleros son perfectas para obtener plantas jóvenes y fuertes en el momento del trasplante. Para más información, no dude en ponerse en contacto con su experto.

Trasplante de plantones:

Una vez obtenida una planta fuerte, el trasplante se realiza dentro de los agujeros precortados que puede solicitar el consumidor, haciendo un pequeño orificio en el coco expandido e introduciendo la plántula de forma que haya un contacto seguro entre el interior de la bolsa de cultivo y las paredes del sustrato del alvéolo, esto asegurará una correcta consolidación de las raíces y un menor porcentaje de plántulas muertas.

Riego y gestión de nutrientes:

La fibra de coco tiene excelentes propiedades de retención de agua, pero es importante mantener unos niveles de humedad adecuados para evitar el estrés de las plantas. Riegue las plantas con regularidad, asegurándose de que el coco esté uniformemente húmedo, todo el exceso de agua se drenará manteniendo también una buena relación de aireación que es muy importante para el desarrollo de las raíces. Además, proporcione a las plantas una solución nutritiva equilibrada en función de la fase fenológica (expertos de Pelemix) para garantizar un crecimiento, una floración y un desarrollo de los frutos óptimos.

Control de plagas y enfermedades:

La vigilancia periódica es necesaria para identificar y controlar las plagas y enfermedades que pueden afectar a los cultivos de tomate. Entre las plagas más comunes se encuentran los pulgones, la mosca blanca y la araña roja, mientras que enfermedades como el tizón y el oídio también pueden suponer una amenaza. Las técnicas de gestión integrada de plagas, como la introducción de insectos beneficiosos o el uso de insecticidas orgánicos, pueden ayudar a controlar las poblaciones de plagas. Además, mantener un espaciado adecuado entre las plantas y proporcionar una ventilación adecuada puede minimizar el riesgo de enfermedades. Sin embargo, con los sacos de cultivo Pelemix, como se ha mencionado anteriormente, obtendrás una producción más sana y libre de patógenos, ya que la cáscara de coco de la que está hecho el sustrato de fibra de coco es un producto de superficie y, por lo tanto, está libre de enfermedades del suelo. Esto crea un entorno higiénico que reduce el riesgo de enfermedades transmitidas por el suelo.

Cosecha:

Los tomates deben recolectarse cuando estén completamente maduros para garantizar un sabor y una calidad óptimos. Retuerza o corte suavemente los frutos, con cuidado de no dañar la planta. La recolección regular favorece la producción continua de frutos y evita que los frutos demasiado maduros atraigan plagas o enfermedades.

Para más información sobre los sacos de coco y el cultivo de tomates, visite pelemix.com.

Recuerde que un mantenimiento y cuidado adecuados son esenciales para el éxito del cultivo de tomates en bolsas de cultivo de fibra de coco Pelemix. Siguiendo estas pautas, podrá disfrutar de una abundante cosecha de sabrosos tomates. No olvides hablar con nuestros expertos siempre que necesites resolver cualquier duda o hacer preguntas sobre nuestros productos.

Cifras: Bolsas de cultivo Pelemix para el cultivo del tomate